Otro día que no para de llover, así que será un domingo de estar en casa, momento de estrenar una fondue que me han regalado hace poco. Es de acero inoxidable, a diferencia del caquelón que se usa para la fondue de queso, que suele ser de barro refractario. Este recipiente es más profundo, ideal para hacer la fondue de carne o fondue bourguignon, una original y divertida manera de cocinar la carne en la misma mesa.

Para la fondue es recomendable usar carne de ternera de primera calidad, y las piezas más tiernas, sobre todo el solomillo o lomo alto, bien limpios de grasa. En algunos supermercados especializados podremos encontrar la carne ya cortada para fondue. Se necesita igualmente una fondue con quemador de alcohol incoporado, para poner en la mesa, y diversas salsas para acompañar.

Si queremos una versión más light podemos sustituir el aceite por caldo de carne, e incluso usar pollo en vez de ternera. La principal ventaja de la fondue es que no requiere apenas preparación, y es una comida excelente. Si no tienes el recipiente especial, que suele ser bastante caro, hay algunas freidoras modernas compactas que incorporan la función de fondue (usando aceite limpio, que no se haya usado antes).

Ingredientes, para 4 personas

500 gr. de carne de ternera muy tierna (mejor solomillo), 700 cc. aceite de semillas (girasol o soja), una hoja de laurel, una patata pequeña. Salsas variadas y pan, para servir.

Elaboración

Limpia muy bien la carne de durezas y grasa, y luego corta en dados de 2 centímetros, lo justo para un bocado. Coloca la carne en cuencos para llevar a la mesa.

Calienta el aceite en el recipiente de la fondue, en el fuego de la cocina, hasta que empiece a humear un poco. Aparta del fuego y añade una patata pequeña pelada, que evitará que el aceite se queme, y una hoja de laurel, para aromatizarlo un poco.

Lleva el recipiente a la mesa, colocándolo sobre el fuego de alcohol, para mantener la temperatura. Vamos pinchando trozos de carne, y cada comensal los irá friendo en el aceite, hasta que tengan el punto deseado. Es conveniente no freír en exceso, ya que la carne quedaría muy seca. Luego se moja en la salsa preferida antes de comerla.

Precauciones, consejos

Lo mejor es usar la fondue de acero inoxidable, con un infiernillo de alcohol incorporado en la base. Para rellenar el infiernillo recomiendo un gel de alcohol especial para fondue, que encontrarás en droguerías, mucho más seguro que el alcohol de quemar, que tiene el peligro de poder volcarse y quemar la mesa (me pasó hace tiempo) o incluso a los comensales.

Especialmente importante es no rellenar  el infiernillo cuando está encendido, causa de peligrosos accidentes. Una opción más segura y cómoda son las fondues eléctricas, que llevan incorporadas una resistencia en la base, o usar unas pastillas de gel de alcohol, en vez del clásico infiernillo.

Las salsas para la fondue

Las salsas que usaremos dependen de nuestros gustos. Lo más sencillo es preparar una mayonesa casera, que podemos aromatizar con curry, mostaza, hierbas, ajo, etc. y luego servidas por separado. Muy tradicionales son la salsa bearnesa y la salsa tártara. Tampoco queda mal con un ketchup de calidad, o algún chutney de frutas o de tomate especiado, muy apropiadas para disfrutar de esta original receta de  fondue de carne o fondue bourguignon.