Hace poco conseguí una curiosa cazuela eléctrica ideal para lo que los americanos llaman slow cooker (cocción lenta). En las publicaciones de allá se ven muchas recetas de estofados y guisos adaptados a este curioso sistema de cocción, normalmente ollas eléctricas programables que cocinan de forma muy lenta los ingredientes durante muchas horas, de manera que los géneros quedan muy tiernos y jugosos. Para estrenar mi particular slow cooker hice hace poco un caldo chino con bayas goji, con buen resultado. Así que anoche quise probar en ella una de mis recetas preferidas de estofado, el estofado de ternera a la cerveza, una receta belga conocida allí como carbonnades flamandes.

Básicamente se trata de estofar la carne con mucha cebolla y cerveza, durante horas. Para acentuar el sabor de la salsa se suele añadir azúcar moreno, mostaza y un poco de vinagre, aumentando así el sabor agridulce del plato. La Carbonnades flamandes puede elaborarse con cerveza Lambic o Gueuze, pero en este caso he usado una cerveza nacional de intenso sabor, una Alhambra especial, hecha en Granada. Siempre es mejor usar cervezas fuertes para este plato, incluso una cerveza negra no queda mal.

Ingredientes, para 2 personas

500 gr. carne de ternera, en dados, 25 gr. mantequilla, sal, pimienta negra, 2 cebollas, 20 gr. azúcar moreno de caña, una cerveza (330 cc), 1 rebanada de pan, 1 cucharada de vinagre de vino blanco, 1 cucharada de mostaza Dijon, a la antigua, 1 bouquet garni ( perejil, laurel, tomillo fresco, romero).

Elaboración

Método con slow cook

Si usas el slow cooker o alguna olla programable parecida, introduce todos los ingredientes en el recipiente, incluida la carne salpimentada. Conecta y deja que cueza muy lentamente durante al menos 12 horas, o toda la noche, hasta que la carne quede muy tierna. Con este sistema se puede cocer hasta 24 horas, según la dureza de la carne.

En vez de vinagre normal me he permitido usar aceto balsamico, si tienes en casa no dejes de probarlo, queda genial con las carnes. La verdad es que con este sistema se prepara en cinco minutos, y luego sólo hay que esperar al día siguiente para tener un excelente guiso en su punto.

Si quieres que quede una salsa más espesa puedes destapar la cazuela la última hora, para que evapore, o añadir un poco de harina fina de maíz, desleída en un poco de su caldo, aunque personalmente no me gusta esto último. No os quiero contar como olía mi cocina esta mañana.

Método tradicional

Si quieres hacerlo a la manera tradicional, calienta en una olla de fondo grueso la mantequilla. Cuando esté derretida añade la carne, salpimentada y cortada en dados gruesos. Deja dorar removiendo y retira. En la misma grasa que queda en la olla saltea las cebollas cortadas en rodajas. Cuando están transparentes añade el azúcar de caña y la cerveza negra.

Deja cocer unos minutos, añade el vinagre, el pan desmigado, la mostaza y la carne reservada, con sus jugos. Incorpora el bouquet garni y deja cocer a fuego muy lento y tapado unas dos horas, o hasta que la carne quede muy tierna, removiendo de vez en cuando.

Lo tradicional es servir este estofado de ternera a la cerveza, receta belga, con un puré de patatas con zanahorias y un poco de mantequilla, pero también se puede acompañar de patatas fritas o hervidas, a gusto de cada uno. Te sorprenderá el sabor intenso de este delicioso estofado.